Postado por: GF Teen Vigo
Fuente: GF Teen California - USA
Por la moda, influencia de los amigos, huyendo de los problemas e incluso por influencia de la familia. Muchos son los motivos que pueden llevar un joven a desarrollar el gusto y el hábito de beber. Para la psicóloga Vanessa Muller, los jóvenes buscan por bebidas alcohólicas debido a la presión del grupo de amigos, pleitos con los padres y cambios provenientes de la propia fase de la adolescencia.
Ya otros jóvenes acostumbran desarrollar la adicción porque encuentran dentro de la propia familia personas que toman, que acaban sirviendo de ejemplo para ellos. Márcio explica que el alcoholismo es una enfermedad, o sea, posee factores genéticos, psicológicos y sociales y las oportunidades del hijo desarrollar el alcoholismo teniendo un padre alcohólico es mayor. “Eso se debe por cuestiones genéticas o por comportamiento aprendido. Cuando en la genética, e comportamental, o sea, el hijo desde pequeño vio su padre llegar borracho en casa, presencio peleas con su madre o huya del padre alcohólico. Por observación, el joven cree que el modelo de hombre y de padre es ese, de un hombre violento, que bebe en exceso. El hijo no posee otra referencia de hombre y acaba siguiendo ese comportamiento inadecuado.
Los perjuicios
Son incontables los problemas que el alcohol puede causar al organismo. Claro que estamos hablando aquí cuando consumido en grandes dosis, pues en pequeñas cantidades él no trae ningún perjuicio a la salud. La bebida no sólo causa daños psíquicos como también familiares, sociales, en el trabajo, además de problemas físicos, causando hasta la muerte. Entre las pérdidas psicológicas podemos destacar la depresión, impaciencia, la frustración, pierda de memoria, cambio de humor, síntomas de falta de la droga, negación, ansiedad, fobias, falta o exceso de sueño, baja auto-estima.
¿Cómo tratar?
El primer paso para el tratamiento es la aceptación de la adicción, o sea, la persona alcohólica necesita reconocer su dependencia. Muchas veces el adolescente no percibe lo cuánto está dependiente de la bebida. Siendo así, es preciso ayudar el joven a reconocer que tiene un problema y que es necesario se trate absteniéndose del alcohol. Buscar ayuda especializada, y envolverse en el problema, pues así como el uso de drogas, el alcohol también afecta y enferma la familia como uno todo.
Existen muchos jóvenes que no toman, pero afirman que se divierten aun así. El viejo dicho, "las cosas a tiempo tienen remedio", es muy verdadero. Si tomamos medidas a tiempo, podemos conseguir que los que no toman no lleguen a hacerlo y los que lo hacen lo dejen.
